Seguramente que en la tranquilidad que ofrece sin mezquindades el “Puesto Nuevo”, tanto Roberto Argañaraz como Aurora Barquet decidieron socialmente gestar una criatura que está dando sus primeros pasos.
Como todo nuevo “ser viviente” tuvo, tiene y tendrá tropiezos… lo principal es que camine y disfrute. La experiencia es fruto de numerosos errores. A no tener miedo, y modestamente recomendamos continuar con esta agraciada vivencia criolla.
Dicha criatura social sumada a la Cristiana: Rodrigo, Lautaro y Martiniano, los hacen merecedores de una distinción: “Especiales”. Te miman tanto que uno aunque casi no quiera, vuelve, como dice el famoso lema del turismo.
Somos viajeros, hombres errantes, que sabemos por un mensaje celestial que en esa “porción de pueblo” como es Puesto Nuevo, tenemos un palenque donde rascarse.
Desde el desayuno hasta la cena se encuentran ellos como centinelas de nuestro itinerario. Son amables, tanto que, te sentís bienvenido siempre, hasta que pareciera que la palabra Adiós fuera una mala palabra. Encima bailan!
Si existe un verbo que saben académicamente bien conjugar Roberto Y Aurora, es el de abrazar. Vivencia hormonal es este lugar en el kilómetro 66 de la ruta N° 21, tramo Atahualpa Yupanqui. Salud por ellos!